Dichos y Frases
Dichos y Frases
“Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”, este viejo dicho popular en varios países de Latinoamérica nos deja ver que cuando alguien hace alarde de algo sea posesión material o cualidad moral, probablemente esté tratando de “proyectar” una imagen que, en el fondo, no se corresponde del todo con la realidad.
Desgraciadamente parte de los anuncios publicitarios y propaganda política hacen honor a ese dicho. Concretamente la memoria me lleva a la campaña que llevó a la presidencia a Hugo Chávez, su “oferta” se basaba en dos pilares fundamentales, una nueva constitución y el combate a la corrupción, todo ello cobijado por el manto del “bolivarianismo” y parecía que el ahora dictador era la reencarnación de Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios Ponte y Blanco (nombre bastante oligárquico) parecía conocer de memoria cada ínfimo detalle de su vida, obra y epistolario y basaba en ellos la promesa de bonanza y felicidad.
Muchos compraron la imagen idealizada e incluso, quienes tenían memoria para hacerlo pensaron que un militar carismático podía repetir la época del “Nuevo Ideal Nacional” Perezjimenista.
Ahora que nuestro planeta inicia un nuevo periplo alrededor del sol y se cumplen 13 cabalísticos años de la euforia posterior a la elección presidencial de 1998, viene bien pensar en aquellas cosas de las que, en aquel tiempo, el entonces presidente electo presumía y de las que el tiempo vino a demostrar eran carencias.
Me limitaré a sus dos pilares de campaña, la constitución y la lucha contra la corrupción. Quien quiera puede recordar que al año siguiente de su elección, el dictador cumplió su promesa, en Diciembre de 1999 en medio de la mayor desgracia natural de los últimos tiempos, Venezuela votaba una nueva constitución, modelo de avanzada en materia social, en Diciembre de 2010, la “moribunda” Asamblea Nacional, renunciando a sus atribuciones por tercera vez en tres años, otorga al Ejecutivo poderes extraordinarios (habilitantes según el argot constitucional) supuestamente por la emergencia provocada por las lluvias en el territorio nacional y por un plazo de 18 meses, prolongando la habilitación 14 meses más allá de su período constitucional como legislatura y por lo tanto coartando la capacidad legislativa de la asamblea entrante, asamblea que por cierto, ya no es monocromática.
Siendo ese el aperitivo y sin entrar en detalles recordemos que es este régimen el que con mayor frecuencia y profundidad ha violado los preceptos constitucionales, cambiando la división política, el sistema económico y algunos de los principios que la constitución del 99 consagra, entre ellos el de propiedad. Así que quien presumió de constitucionalista, cumplió con la forma pero carece de fondo, es decir, logró su promulgación para después convertirla en poco más que letra muerta utilizable a conveniencia de su régimen.
El otro pilar del cual presumía era su inquebrantable deseo de justicia y erradicación de la corrupción y la impunidad. Supongo que un gobierno que inicia una cruzada contra los flagelos mencionados presume de incorruptible y responsable. Nuevamente sin detalles, algunas caras que ya rayan en la obesidad, algunos autos y quintas de lujo, algunas cuentas y propiedades en el exterior, la participación en empresas y negocios son las cosas que parecieran caracterizar a algunos connotados personeros del régimen y ahí solo apuntamos a la corrupción en sentido puramente económico, en otro orden está la descomposición moral que prohíja al
régimen cubano, pide legitimación para la guerrilla colombiana y de alguna manera facilita el narcotráfico sin olvidar que si por corrupción se entiende, según Wikipedia, “el mal uso público (gubernamental) del poder para conseguir una ventaja ilegítima” ¿Qué mayor corrupción que el ventajismo electoral del régimen?
Así que ¿Dónde quedaron aquellas cosas de las que se presumía? El régimen ya ha demostrado durante los pasados 13 años que tiene graves carencias, las cuales se resumen en una conocidísima frase del Libertador.
“Moral y Luces son nuestras primeras necesidades”
“Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”, este viejo dicho popular en varios países de Latinoamérica nos deja ver que cuando alguien hace alarde de algo sea posesión material o cualidad moral, probablemente esté tratando de “proyectar” una imagen que, en el fondo, no se corresponde del todo con la realidad.
Desgraciadamente parte de los anuncios publicitarios y propaganda política hacen honor a ese dicho. Concretamente la memoria me lleva a la campaña que llevó a la presidencia a Hugo Chávez, su “oferta” se basaba en dos pilares fundamentales, una nueva constitución y el combate a la corrupción, todo ello cobijado por el manto del “bolivarianismo” y parecía que el ahora dictador era la reencarnación de Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios Ponte y Blanco (nombre bastante oligárquico) parecía conocer de memoria cada ínfimo detalle de su vida, obra y epistolario y basaba en ellos la promesa de bonanza y felicidad.
Muchos compraron la imagen idealizada e incluso, quienes tenían memoria para hacerlo pensaron que un militar carismático podía repetir la época del “Nuevo Ideal Nacional” Perezjimenista.
Ahora que nuestro planeta inicia un nuevo periplo alrededor del sol y se cumplen 13 cabalísticos años de la euforia posterior a la elección presidencial de 1998, viene bien pensar en aquellas cosas de las que, en aquel tiempo, el entonces presidente electo presumía y de las que el tiempo vino a demostrar eran carencias.
Me limitaré a sus dos pilares de campaña, la constitución y la lucha contra la corrupción. Quien quiera puede recordar que al año siguiente de su elección, el dictador cumplió su promesa, en Diciembre de 1999 en medio de la mayor desgracia natural de los últimos tiempos, Venezuela votaba una nueva constitución, modelo de avanzada en materia social, en Diciembre de 2010, la “moribunda” Asamblea Nacional, renunciando a sus atribuciones por tercera vez en tres años, otorga al Ejecutivo poderes extraordinarios (habilitantes según el argot constitucional) supuestamente por la emergencia provocada por las lluvias en el territorio nacional y por un plazo de 18 meses, prolongando la habilitación 14 meses más allá de su período constitucional como legislatura y por lo tanto coartando la capacidad legislativa de la asamblea entrante, asamblea que por cierto, ya no es monocromática.
Siendo ese el aperitivo y sin entrar en detalles recordemos que es este régimen el que con mayor frecuencia y profundidad ha violado los preceptos constitucionales, cambiando la división política, el sistema económico y algunos de los principios que la constitución del 99 consagra, entre ellos el de propiedad. Así que quien presumió de constitucionalista, cumplió con la forma pero carece de fondo, es decir, logró su promulgación para después convertirla en poco más que letra muerta utilizable a conveniencia de su régimen.
El otro pilar del cual presumía era su inquebrantable deseo de justicia y erradicación de la corrupción y la impunidad. Supongo que un gobierno que inicia una cruzada contra los flagelos mencionados presume de incorruptible y responsable. Nuevamente sin detalles, algunas caras que ya rayan en la obesidad, algunos autos y quintas de lujo, algunas cuentas y propiedades en el exterior, la participación en empresas y negocios son las cosas que parecieran caracterizar a algunos connotados personeros del régimen y ahí solo apuntamos a la corrupción en sentido puramente económico, en otro orden está la descomposición moral que prohíja al
régimen cubano, pide legitimación para la guerrilla colombiana y de alguna manera facilita el narcotráfico sin olvidar que si por corrupción se entiende, según Wikipedia, “el mal uso público (gubernamental) del poder para conseguir una ventaja ilegítima” ¿Qué mayor corrupción que el ventajismo electoral del régimen?
Así que ¿Dónde quedaron aquellas cosas de las que se presumía? El régimen ya ha demostrado durante los pasados 13 años que tiene graves carencias, las cuales se resumen en una conocidísima frase del Libertador.
“Moral y Luces son nuestras primeras necesidades”
Pues si, siguen siendo nuestras primeras necesidades y por lo que parece aún no serán satisfechas... Por lo menos no si seguimos por donde vamos.
ResponderEliminarFelicidades mi hermano, por todos tus logros en éste país, quiza recuerdes la fabula de que un Caballo y un Conejo se conideraban como hermanos, saludos a la familia.
ResponderEliminarNicolás Hernández Garibaldi.